Fue el día en que todo sucedio. Todo lo malo de repente se volvio hermoso y todas las lagrimas que ella habia llorado se convirtieron en un simple rio que se llevó todos los problemas. Solo dos palabras bastaron para que todo a su alrededor fuera perfecto, como lo habia soñado siempre. Fue el te amo más dulce que jamás habia escuchado. No necesitaba nada más. Ella ya era feliz ...
El destino es como un ejército de hormigas laboriosas. Miles de hormiguitas haciendo su parte del trabajo. Uno cree que controla su vida, pero el destino lentamente se va configurando. Una serie de circunstancias, decisiones y casualidades van construyendo el destino. Cabos sueltos, detalles ínfimos, imprevistos.
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